Guía de compras: vinos realmente extremos para salir de lo común. Noticias de vinos y bebidas. espaciovino - Vinoteca online
TU PEDIDO
¿Ayuda? Llamanos al 5352-8466 (VINO)

GUÍA DE COMPRAS: VINOS REALMENTE EXTREMOS PARA SALIR DE LO COMÚN

Guía de compras: vinos realmente extremos para salir de lo común
Tiempo de lectura:
7 minutos

Compartir

11/09/2015
¿Te aburriste un poco de Mendoza y estás en busca de algo más intenso? Conocé algunos ejemplares que llevan un paso más allá el concepto de “vinos extremos”

Para todos aquellos que quieren salir de lo común, esta guía de compras de vinos recomendados está orientada a ejemplares realmente extremos. El factor en común es que los viñedos están en lugares de difícil acceso y su elaboración implica un desafío a la naturaleza.

A tomar nota…

Altos La Ciénaga blend 2014 – Bodega Altos La Ciénaga – Precio sugerido: $120

Por qué es un vino extremo: esta bodega, si bien está creciendo en volumen, todavía sigue estando habilitada como un establecimiento para la producción de vino casero. Se trata de la primera escala que nuclea a los emprendimientos que elaboran menos de 6.500 litros anuales. La particularidad de Altos La Ciénaga, impulsada por Luis Rolando Díaz, es que los viñedos están ubicados en un paraje llamado La Ciénaga, ubicado a casi 30 kilómetros de Colalao del Valle, Tucumán. Para llegar hasta allí, no hay rutas, sólo una huella. “Hay que atravesar dos ríos que en ciertas épocas del año se vuelven muy peligrosos. Incluso, hay días que no podemos pasar”, relata este enólogo, un verdadero emprendedor del Norte Argentino. Para dificultar las cosas, en épocas de vendimia, no se puede entrar con camión, sino que toda la logística se tiene que resolver con una camioneta pequeña. Pese a todo, en ese paraje de suelos poco profundos y mucha piedra, ubicado a 2.350 metros de altura, ya están trabajando unas cuatro hectáreas. De allí surge este blend tinto, conformado por Syrah (70%), Malbec (20%) y Cabernet Sauvignon (10%).

Qué ofrece: fruta roja y negra intensa, densa y madura, con una segunda capa de especias y caramelo, propio de su paso a lo largo de siete meses por barricas de primer, segundo y hasta tercer uso. Al paladar se presenta como un vino de ataque intenso, envolvente, bien sucroso. Su medio de boca está cargado de fruta negra, que recuerda a la mermelada de sauco. Sus taninos de pulso duzlón, con una textura algo rústica, le imprime más presencia. Avanza con un recorrido algo breve en el paladar pero con una aromática contundente, con un retrogusto que deja un marcado recuerdo a ciruelas pasas e higos secos.

Conclusión: es una perlita, un vino del que pocos escucharon hablar y cuya gran historia por detrás amerita darle una chance. En Buenos Aires por el momento sólo se consigue en una vinoteca (Friendly Wines, Marcelo T. de Alvear 668)

Cara Sur Bonarda 2014 – Bodega Cara Sur – Precio sugerido: $170

Por qué es un vino extremo: este es uno de los últimos hits de la vitivinicultura local. Tal vez a muchos no les resulte conocido el vino ni la bodega. Pero basta comentar que detrás de esta etiqueta está la siempre inquieta mente de Sebastián Zuccardi, responsable de darle el último gran giro a Familia Zuccardi. Este enólogo, que le marca el ritmo a la nueva generación de profesionales, se juntó con el viticultor Francisco Bugallo y, a partir de un parral de más de 50 años ubicado en Barreal, en el Valle de Calingasta (San Juan) alumbraron la última gran novedad en materia de Bonardas. Quien haya tenido el privilegio de haber visitado Barreal sabe que si llegar hasta esa localidad es todo un desafío, al tratarse de un camino largo y sinuoso, hacer vinos es una proeza mayor todavía.

Qué ofrece: este vino puede ser extremo desde el punto de vista de la concepción. Pero el resultado en la copa muestra un ejemplar de gran delicadeza, que se aferra con argumentos sólidos al manual de la tipicidad de la Bonarda. Gusta por su fruta roja fresca, de aromas francos y puros, con leves toques resinosos y otros que recuerdan al romero. En boca es jugoso y largo, con esa levedad tan típica de las Bonardas. Su medio de boca lo lleva a otro nivel, con una fruta roja intensa pero equilibrada. Se extingue algo rápido, pero no sin antes dejar una sensación de delicadeza en el paladar.

Conclusión: vino fresco y delicado, para disfrutar junto a una selección de quesos no muy intensos y que no opaquen el protagonismo que requiere este ejemplar.

Colomé Lote Especial Malbec – Bodega Colomé – Precio sugerido:$235

Por qué es un vino extremo: Colomé, además de elaborar muy buenos vinos, puede arrogarse un mérito que ninguna otra bodega está en condiciones de hacerlo: ya está trabajando con viñedos a 3.100 metros sobre el nivel del mar, lo que los convierte en los de mayor altura en el mundo, certificado Guinness de los rércords incluido. Mientras experimenta en esa finca, se da el lujo de trabajar un viñedo a más de 1.700 metros sobre el nivel del mar, en un área semiárida y desértica, dentro del Alto Valle Calchaquí.

Qué ofrece: Malbec de aromática profunda e intensa y, sobre todas las cosas, elegante. Ciruelas secas, punta de regaliz, especias, toques de vainilla y ahumados completan una paleta penetrante y persistente. Hacia el final, se percibe un levísimo trazo licoroso. Al paladar ataca amplio, con un medio de boca bien marcado en estructura y aromas. Taninos bien evolucionados, que aportan rugosidad y contribuyen a la buena textura general. A medida que se extingue, en un largo, largo recuerdo, deja una nota de ciruelas pasas bien marcada.

Conclusión: vino intenso a nivel aromático, para quienes gustan de la fruta madura y de los tintos con algo de evolución.

Altupalka Malbec Extremo 2011 – Bodega Altupalka – Precio sugerido: $480

Por qué es un vino extremo: Altupalka significa “Valle alto” en lengua quechua. Y vaya si es alto: la finca principal del proyecto está ubicada a unos 2.600 metros de altura sobre el nivel del mar. Más precisamente, se emplaza en Tacuil, a 40 kilómetros de Molinos, una pequeña localidad salteña emplazada a 300 kilómetros de la capital de esa provincia pero que, por ser un camino sinuoso, requiere de más de cinco horas de viaje en auto. Si ir por turismo es toda una aventura, levantar un viñedo es un acto de templanza. Así, Altupalka hoy por hoy es la bodega argentina más extrema en términos de altura y que tiene al menos una etiqueta en las góndolas.

Qué ofrece: bajo un esquema de alta densidad, el enólogo logró un tinto de alto impacto, con una fruta roja confitada potente en nariz, que suma toques balsámicos –como orégano y laurel- y que luego se complementa con trazos de tabaco y vainilla. En boca ataca intenso, con una gran amplitud y fluidez total. Los taninos granulados dan rica textura, en tanto que su paso por barricas deja un grato recuerdo a vainilla y chocolate. Un vino full bodied, con músculo, alcohol elevado -“todo alto”, como explicó el propio Martorell-, pero así y todo, es un vino completamente bebible, sin aristas, sin una madera demasiado al frente y que, por el contrario, está bien integrada.

Conclusión: es un vino que sorprende, por su potencia pero a la vez por su elegancia. No hay dudas de que esta etiqueta sigue el camino de los salteños modernos.

Fuente: Juan Diego Wasilevsky – iProfesional.

OPINÁ SOBRE ESTA NOTICIA


Selecciones especiales