Ya son 23 las bodegas que integran "La Ruta del Vino" y ofrecen tours y alojamiento a los turistas, ya sea en los cascos de estancia de las firmas más tradicionales como en los hoteles boutiques de las más chicas.

Salta tiene los viñedos más altos del mundo y un puñado de bodegas orientadas al segmento premium. Si bien el vino aporta poco a la economía provincial , tiene un alto capital simbólico: es el imán para atraer a los turistas ABC1.

En los últimos años, las inversiones en la industria vitivinícola salteña sumaron US$100 millones , según datos oficiales. Aunque sus vides sólo representan el 1% del total del país, las 31 bodegas de la provincia exportan 1.400.000 botellas a 30 países.

Ya son 23 las bodegas que integran "La Ruta del Vino" y ofrecen tours y alojamiento a los turistas, ya sea en los cascos de estancia de las firmas más tradicionales como en los hoteles boutiques de las más chicas. "Muchas bodegas pequeñas hacen diferencia vendiéndole directamente al turista", dice Osvaldo Domingo, de la bodega que lleva su apellido.

"El 99% de los viñedos salteños produce vinos finos" explica Luis García Bes, asesor de la secretaría de Comercio de la provincia. Los funcionarios salteños estuvieron en Buenos Aires en medio de la exposición Vinos de Altura, que convocó a 4.000 visitantes días atrás. El 70% de las bodegas son de las consideradas boutiques, con poca escala de producción.

Fuente: iEco.