Se trata de un vino elaborado con 93% de Syrah y 7% de Viognier. Desde la bodega destacaron su perfil suave, redondo, cárnico y sabroso.

Viña Las Perdices presentó Las Perdices Syrah-Viognier cosecha 2012.

Se trata de un vino elaborado con uvas 93% Syrah y 7% Viognier, provenientes de viñedos de Agrelo, Luján de Cuyo, y Barrancas, Maipú.

Desde la bodega destacaron que se trata de "un vino que muestra los caracteres típicos de estas dos variedades de uvas, co-fermentadas para lograr su sinergia y otorgar complejidad".

La amplitud térmica es un factor determinante en el cultivo de la vid y la producción de vinos. Cuando esta supera los 20°C, durante el período de maduración de las uvas, favorece su desarrollo dando como resultado "frutas únicas, de alta calidad enológica y gran concentración".

"La amplitud térmica de este especial lugar de Agrelo define la intensa concentración de color y complejos aromas que Viña Las Perdices obtiene en este bi-varietal Las Perdices Syrah/Viognier", recalcaron.

Desde Viña Las Perdices resaltaron que este Syrah-Viognier 2012 "es un vino color rojo rubí con aromas complejos de cerezas, y arándanos dominados luego con la fragancia sutil del damasco y el durazno blanco. En boca despliega todo su potencial, suave, redondo, cárnico y sabroso. Taninos maduros bien logrados. Final largo y refinado. Ideal para acompañar platos de la cocina de caza menor, elaboraciones de largas cocciones y todo tipo de setas".

Las Perdices Syrah-Viognier 2012 tiene un precio sugerido de $65 en vinotecas. Los vinos de Viña Las Perdices son comercializados en Capital, Buenos Aires y Patagonia por la Consultora Umami.

El corte Syrah-Viognier

Côte-Rôtie es uno de los viñedos más antiguos de Francia. Sus orígenes se remontan a los griegos aunque su primer desarrollo fue en época romana.

El Côte Rôtie (literalmente "colina tostada") está ubicado en una soleada región del sudoeste de Francia, al norte del Ródano, donde la única variedad tinta aceptada es la syrah, localmente llamada sérine, que abarca el 95% del viñedo.

Las zonas soleadas dan vinos con intensidad frutal pero sin frescura, así los viticultores descubrieron hace tiempo que el corte de uvas tintas con blancas es perfecto para cuando se quiere elaborar vinos exaltando su frescura, además, mejora la fermentación de la uva tinta mediante el fenómeno de co pigmentación, aportando sedosidad, finura aromas exóticos, acidez y abrillantando el color del vino.

El corte Rôtie lleva Syrah y Viognier y se exige que la cepa tinta contribuya con un mínimo del 80% en los ensamblajes y, como complemento, se acepta la uva blanca Viognier en un máximo del 20%.

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Fuente: iProfesional.