La región produce blancos muy frescos y rosados de buena acidez. El mix perfecto para beber en verano.

Cuando el verano despliega toda su intensidad, el termómetro resopla, la sombra no alcanza y en las noches no se duerme. Y a la hora de comer y de beber, el cuerpo pide cualquier cosa que lo refresque.

Sobre el mantel aparecen tomates rellenos, ensaladas verdes, alguna que picada de quesos y fiambre. Y en las copas, los vinos gordos y de mucho cuerpo pierden la batalla contra los joviales y refrescantes.

En la Patagonia se producen muy buenos blancos de ese tipo. Algunos Chardonnay de aromática frutal e invitante; Sauvignon Blanc de un filoso perfil glacial; algún Semillón que destaca por su elegancia y sabor fresco. Incluso los rosados -de los que hay pocos, todavía- logran en la región una rica ecuación de aromática frutal con paso fresco y apenas envolvente.

Y ahora que el verano aprieta bajo los techos, estos son los vinos patagónicos perfectos para beber a la sombra o en el jardín por la noches:

Saurus Chardonnay 2010 VER FICHA AQUÍ. es uno de los mejores ejemplares del varietal en la región. Aromático, de acidez chispeante, destaca su cuerpo medio y su andar elegante. Rico blanco para picadas veraniegas de queso y fiambre.

Picada 15 Blanco 2011 VER FICHA AQUÍ. es un blend a base de Chardonnay y Sauvignon Blanc, con una pizca de Pinot Noir. Intenso, refrescante, es una opción ideal para tener sobre la mesa en una frappera con abundante hielo.

Torrontés Fin del Mundo 2011, recién salido del horno, este vino es un curioso ejemplo de lo que la variedad blanca insignia de Argentina puede dar en una zona fría. Ligeramente aromático, tiene una boca rica y elegante.

Humberto Canale Old Vineyard Riesling 2011 VER FICHA AQUÍ. representa lo mejor del patrimonio vitícola de la región patagónica. Variedad plantada hace más de 60 años, estas viejas viñas dan un blanco luminoso, de unos ricos aromas florales y una boca envolvente y tirante a la vez.

Saurus Malbec Rosé 2010 VER FICHA AQUÍ. resulta un ejemplar perfecto para comer. Su buen balance gustativo, sumado a su cordial andar por el paladar, lo ponen como vino ideal junto a unas ensalada de atún o con una rica lengua vinagreta.

Humberto Canale Semillón 2009 VER FICHA AQUÍ., uno de los pocos varietales que están vigentes con esta uva, es una blanco fragante, con una evidente nota de miel y un paladar amable y de largo final. Es perfecto para una mesa de fiambres.

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Fuente: La Mañana de Neuquén.